Excelencia: cómo tomar las riendas de tu vida
“La Excelencia es cuando cada día mejoras un poquito porque estás comprometido con eso, no es un objetivo es un proceso” Esteban Cuéllar
Para mí la Excelencia, como fundador del Instituto Excel Coaching, es el hecho de aspirar a mejorar cada día de tu vida un poquito, pudiendo evaluar los progresos que vas teniendo a corto – medio y largo plazo. Es por eso que uno de los ejercicios que hacemos en nuestros cursos experienciales es el de analizar, en la línea del tiempo, tus logros, lo que has logrado ya, en los últimos años. Porque si tú estás comprometido con la mejora constante y continuada, te darás cuenta de que cada año evolucionas mucho.
El comportamiento procede de los valores, y los valores han de ser dirigidos por la ecología: es decir, hacer algo que sea bueno para ti, para la gente con la que te relacionas y para el planeta. Es una buena elección sobre todo cuando tus valores están alineados con la libertad y la independencia.
Cómo tomar las riendas de tu vida y mejorar significativamente
“Los que van a tener mayores probabilidades de éxito son los que se atrevan a tomar las riendas de su vida: a aprender y a cambiar” Esteban Cuéllar
Stephen Covey nos hablaba de pasar de la dependencia a la interdependencia. De depender de los demás, padres, jefes, a depender de ti mismo/a; montar tu propia empresa, por ejemplo; y lo que se denomina, la interdependencia, conseguir cosas juntos; reunir un grupo de iguales, un equipo de personas que te complementen y que mejoren lo que tú solo/a podrías hacer.
Quiero apoyar, por tanto, el paradigma de la psicología positiva, el desarrollo personal, a través del coaching, la PNL y la neurociencia, que afirma que podemos superar nuestras limitaciones y aprender de forma positiva enfocándonos en las soluciones, en los objetivos, y sobre todo, disfrutando del proceso.
La certeza del ganador es una actitud y se puede entrenar. Lo primero que tienes que hacer si quieres entrenar esa capacidad y mejorar tu actitud y tu carácter, es querer mejorar y aprenderlo. Desarrollar hambre por aprender y por mejorar, si no hay hambre, infórmate de las ventajas de tener curiosidad y esperanza en la mejora propia. La certeza reside en el arte de enfocar con toda tu alma el objetivo que quieres conseguir, y no mirar atrás ni para coger carrerilla.
Otro aspecto clave es desarrollar una mentalidad de abundancia, que implica superar el egoísmo y hacer algo para ti y para los demás, desarrollar una idea y ofrecer valor a las personas, algún servicio o algo de valor en uno u otro sentido.
El selfcoaching dice que cuanto mejor estés tú, cuanto más te hayas trabajado a ti mismo/a, equilibrado tus puntos débiles y desarrollado tus talentos, más vas a tener para dar y lo vas a hacer con mayor facilidad y menor gasto energético.
Otro aspecto fundamental es el de disfrutar del proceso, y tiene que ver también con una frase que leí en un libro de autoayuda de Napoleon Hill, autor del best seller Piense y hágase rico:
“Págate a ti primero ”
¿Qué quiere decir eso?
Pues significa que si tú no estás bien, si no eres feliz, tú vas a ser menos efectivo y vas a tener menos energía para trabajar. Y el trabajo es el secreto del éxito, no te engañes. Se lo he preguntado a los mejores, y todos me han dicho lo mismo.
Resultados
“Si quieres montar tu propia empresa deberás aprender a gestionarla y a vender tus productos: no basta que sepas hacer lo que vendes, tu arte; vender tu servicio (tu tecnología), una empresa requiere de los dos ingredientes primeros. Y de que el líder tenga la capacidad de soportar la incertidumbre que generan las dificultades y las demoras” Esteban Cuéllar
Que por cada resultado que obtengas, te tienes que premiar, así estarás cuidando la relación contigo mismo y como consecuencia de ello podrás dar más a los demás porque estarás en un buen estado emocional, de abundante generosidad y empatía.
Es importante que si te esfuerzas y asumes riesgos vayas teniendo alguna recompensa por el camino, y si está orientada a la salud, mejor.
Antes de la crisis había una creencia en este mundo que decía: “Antes de 5 años el 80% de las empresas se estrellan”. Ahora las cifras han cambiado y se puede decir literalmente que no sólo se han estrellado las empresas que llevaban menos de 5 años sino también el resto.
Muchos negocios han tenido que cerrar pero los que han aguantado, esos son los imprescindibles porque se han tenido que reinventar y es en ese proceso de transformación donde la perspectiva cambia y donde la gente supera sus limitaciones del pasado.
Necesitamos hacer las cosas de otra manera, abrirnos al cambio, a lo nuevo – Nada es para siempre.